El gobierno de Milei ajusta la Cultura

    Avances sobre el Instituto Nacional del Teatro, motosierra y batalla cultural.

    2
    51
    foto del 15 de enero del 2024, cuando artistas y activistas culturales protestaban en contra de la "Ley Bases", en ese momento un proyecto de ley que disponía el cierre de ese y otros organismos culturales,

    El gobierno nacional, a través de su vocero presidencial Manuel Adorni dio a conocer que el Instituto Nacional del Teatro (INT) dejaba de existir tal como se lo conocía.

    El 21 de mayo, en 10 minutos, Adorni enumeró una variada batería de medidas mezcladas con anuncios y estadísticas en el marco de la reestructuración del Estado, del achique, la eficiencia y otras argumentaciones de las que suele valerse la lógica libertaria para justificar sus acciones.

    Destina tan solo 70 segundos para decir que avanza en la reforma del INT: “Se recibió un instituto sobredimensionado y con funciones duplicadas” tiró como un hecho… cuando en realidad las representaciones vinculadas al teatro  señalan lo insuficiente de la estructura del Instituto para  responder a las gestiones a su cargo. 

    También en ese minuto con diez segundos dijo que se eliminó el Consejo Directivo y los representantes provinciales, y que a partir de ahora, va a haber un consejo asesor ad honorem. Remata con que el gobierno se propuso eliminar instituciones, organismos y normas inútiles y se regodea con poner números a las áreas, secretarías, ministerios y contratos que se dieron de baja. Argumentan un ineficiente uso del recurso por el porcentaje que implica el pago a quienes trabajan en el área.

    Adorni olvida decir que el presupuesto quedó atrás en contextos de alta inflación y una solución posible es aumentarlo para equilibrar lo destinado a sostener la estructura de funcionamiento y el dinero destinado a premios y subsidios. Buscan insidiosamente resaltar que todo esto se sostiene “con la nuestra”, pero omite decir que el Instituto además de las partidas definidas en el presupuesto tiene un financiamiento específico a partir de impuestos a medios de comunicación y el juego. 

    La conferencia siguió cerca de 8 minutos más con la exposición del vocero diputado electo. A continuación, 50 minutos de preguntas que el ministro respondió como si estuviera aburrido de ser tan crack con su cinismo cuando la pregunta cuestiona o indaga sobre una acción de gobierno. 

    Es asombroso lo estéril que puede volverse la mejor pregunta cuando del otro lado se responde todo; a veces con la cintura de un boxeador para una salida elegante y otras veces, con la cara dura con la que amortigua el golpe sin importarle recibir otra pregunta. 

    En un minuto y diez segundos comunicaron algo que pretende tirar abajo 27 años de historia y muchas décadas de lucha previas a la sanción de la ley 24.800, Ley Nacional del Teatro.

    Lo que dice y lo que implica el decreto

    En julio del 2024 el gobierno logra promulgar la llamada Ley “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los argentinos”. Después de  un recorrido que se inició en enero del 2024 y con distintas instancias de discusión que generaron idas y vueltas entre las distintas cámaras del congreso y una reducción de artículos ( de 664 a los 238 finales)  el 8 de julio el Estado Nacional  la promulga. Es la Ley que declara la Emergencia, la reforma del Estado, la promoción del empleo registrado, la modernización laboral, y será recordada por la inclusión del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI).

    En aquella oportunidad ,las negociaciones que permitieron que salga la ley dejó afuera algunos temas sensibles, entre ellos el fin de la moratoria jubilatoria y la privatización de algunas empresas públicas. También incluyó la prohibición de la facultad del poder ejecutivo de disolver organismos vinculados a la cultura. 

    Pero en el decreto anunciado en mayo de este año se vale de la declaración de “emergencia pública en materia administrativa, económica, financiera y energética, por el plazo de UN (1) año” enunciada en la Ley Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los argentinos y antes de que ese plazo se cumpla, el ejecutivo decide atender aquellos asuntos que le quedaron pendientes en aquel momento. 

    En el Decreto 345/2025 resuelve: 

    • ARTÍCULO 3°.- Instrúyese a la SECRETARÍA DE CULTURA de la PRESIDENCIA DE LA NACIÓN a conformar un Consejo Asesor ad honorem, integrado por un representante del quehacer teatral por cada una de las regiones culturales argentinas, el que asesorará con carácter no vinculante a la unidad organizativa a crearse con competencia en la materia, conforme lo dispuesto por el artículo 2° del presente decreto.
    • ARTÍCULO 6°.- Sustitúyese el artículo 7° de la Ley N° 24.800 por el siguiente:
    • “ARTÍCULO 7º.- Créase el INSTITUTO NACIONAL DEL TEATRO, el cual funcionará como unidad organizativa dependiente de la SECRETARÍA DE CULTURA de la PRESIDENCIA DE LA NACIÓN, para la promoción y apoyo de la actividad teatral. La SECRETARÍA DE CULTURA de la PRESIDENCIA DE LA NACIÓN será la Autoridad de Aplicación de la presente ley”.

    La motosierra, se mete con un presupuesto ínfimo en relación al general del Sector Público Nacional.  

    En enero del 2024 la Red de Gestión Cultural publicó un informe que daba cuenta el peso que tenía el presupuesto de organismos culturales en el Sector Público Nacional. De este análisis se puede observar que del 2021 al 2023 al INT se le presupuestó entre el 0,0140 % y el 0,0102% de “la nuestra” para sus acciones anuales. En el 2024 y 2025 el porcentaje destinado al Teatro es menor aún,  dado que en ambos casos  se trata de prórrogas del presupuesto ejecutado en 2023. 

    ¿Cuánto de motosierra y cuánto de batalla cultural en torno a esto? Un poco y un poco. Capaz que se trata más de belicosidad cultural que otra cosa. 

    En la búsqueda del equilibrio fiscal parece que las armas apuntan a achicar el Estado, no sólo con cierres y despidos, sino también por el lado del atraso de las jubilaciones y los salarios estatales. Además implementa recortes en las partidas presupuestarias en sectores como salud, educación, infraestructura, ciencia y tecnología.

    Bajo las mismas lógicas ajustadoras le llega el turno a la institución que fomenta el teatro a nivel nacional. El INT sobrevivió al ataque inicial y al intento de hacerlo desaparecer con el primer mega decreto de diciembre del 2023. Pero ahora sí, se suma a las filas de los tantos sectores agredidos por este gobierno. 

    Laura Vinaya, representante rionegrina del Instituto, opina sobre las implicancias de esta acción de gobierno: “Hoy hay una eliminación del INT como órgano ejecutor de la Ley. Se le ha quitado la autarquía. Y lo que está pendiente de hacer, pero ya lo escribieron,  es la anulación de la federalidad en tanto que eliminan representaciones provinciales y anulan al Consejo de Dirección como órgano máximo de decisión para pasar a tener decisiones en una sola persona, con asesores ad honorem”.  

    “… Quieren administrar los fondos específicos y con ello conducir discrecionalmente la producción teatral. Anulan la pluralidad, la diversidad también. La consecuencia fundamental es que los públicos federales van a ir perdiendo acceso al teatro como experiencia cultural y entonces, derechos…”. 

    En concreto el Instituto  deja de ser un ente autárquico y pasa a depender de la Secretaría de Cultura de Nación, dependiente de Presidencia de la Nación  y se elimina el Consejo de Dirección de carácter federal con su representantes provinciales que será remplazado  por un consejo ad honorem.

    La representación federal y la participación de protagonistas del quehacer teatral en la toma de decisiones hacen de ésta una ley querida y apropiada por actores y actrices que resaltan el carácter plural y democrático que la 24.800 le da al INT. 

    Gracias al Instituto el teatro ha llegado a nuevos públicos y a muchos lugares que sin su financiamiento no hubiese llegado. Salas grandes y chicas, de pequeños elencos o gestiones colectivas, ciudades, pueblos y parajes, con funciones, capacitaciones, encuentros y festivales. El instituto permite la producción de los elencos y el sostenimiento de los espacios. 

    Está la ley, está la institución, está el hacer teatro… y la pretensión de este gobierno de ajustar la historia con un decreto. 

    Que se muestren inclementes cuando  comunican sus acciones les da un aire victorioso a los  desreguladores. ¿Frente a esto, se trasladará el teatro a la calle? ¿seremos espectadores o partícipes de una nueva intervención que de abajo hacia arriba defienda una ley que funciona y ponga un freno a quienes envalentonados pretenden profundizar esta revolución de derecha? No todo está dicho… Arriba el telón!.  

    2 COMENTARIOS

    1. ¡Gracias Mariano por este informe crítico, que «presenta», «enseña», y «demuestra» la importante y fundamental existencia del INT., y a la vez baja las «caretas» de quienes VIENEN POR TODO, NUESTRA CULTURA, NUESTRA IDENTIDAD, NUESTRA PACHA, NUESTRA VIDA!!! Es imperioso rebelarnos, es inminente presentar resistencia!!! ¡VIVA EL TEATRO, VIVA LA CULTURA, VIVA LA VIDA QUE SUPIMOS CONSTRUIR DEMOCRATICAMENTE!!! ❤️

    DEJA UNA RESPUESTA

    Por favor ingrese su comentario!
    Por favor ingrese su nombre aquí